La familia Cañaveras-Guadarrama era bastante conocida en el Huete del siglo XVII por el poder que llegó a ostentar. Recordemos como doña Antonia Cañaveras-Guadarrama (quien era hija del regidor perpetuo de Huete don Juan de Cañaveras), legó en su testamento a su nuera doña Quiteria-Antonia Salonarde (esta de ascendencia bonachera), un pájaro de oro dentro de una jaula guarnecido con diamantes.
Precisamente, en el año 1647, se firmaba ante el escribano optense Cristóbal de Rozalén, la carta de dote de doña María de Alcázar y Medina, con su esposo don Juan de Cañaveras-Guadarrama. Doña María era hija de Francisco de Alcázar e Isabel de Medina (ambos vecinos de Huete). Francisco aportó para su hija una dote de 1000 ducados, unas casas principales en la calle nueva de dicha ciudad, otras residencias más modestas, además de una escritura de censo, media docena de anillos de oro y varias piezas textiles entre las que cabe destacar "cuatro reposteros con unos escudos de armas". Por su parte Juan de Cañaveras aportará varios centenares de ducados, joyas y dos vestidos negros.
David Gómez de Mora
Referencias:
-Archivo Histórico Provincial de Cuenca. Protocolos notariales, signatura P-1184
-Archivo Municipal de Huete. Protocolos notariales. Caja nº13. Año 1647