Entre las muchas familias que conforman el corpus nobiliario de esta tierra, nos encontramos con el caso de los Ojeda. Un linaje, a priori de origen burgalés, pero a su vez también establecido en la provincia de Cuenca como mínimo desde finales del medievo. Motivo que ha generado numerosas confusiones, sobre las que historiadores e investigadores del pasado todavía tienen mucho que decir.
Conocemos representantes de este solar afincados en lugares variopintos, aunque hasta la fecha sin poder relacionar un mismo origen familiar, a pesar de que en sus tradiciones genealógicas todos se hacen descender de un progenitor burgalés.
Uno de los trabajos más destacados que tratan las raíces de este apellido es el de Gonzalo Miguel Ojeda, quien en un artículo titulado “El hidalgo Alonso de Ojeda”, desenmascara las claves para entender las relaciones genealógicas de esta familia y las consiguientes tesis que han abogado por arraigar sus raíces con la geografía conquense.
El tema de los Ojeda ha sido motivo de confusión por la aparición en documentos de una serie de personajes con idéntico nombre y apellido dentro de un mismo intervalo cronológico, hecho que ha suscitado controversias a la hora de querer precisar el origen del famoso Alonso de Ojeda que participó en la colonización del Nuevo Mundo.
Incluso en este sentido la arqueología puede aportar algunas luces, ya que existen los restos de una torre llamada de los Infanzones de Ojeda, que según se cree pudo ser construida en el siglo XIII, para luego ser reformada posteriormente por uno de los descendientes de los Ojeda, tal y como reza en una inscripción grabada en piedra, a través de un bloque que estuvo colocado en el dintel de su puerta con la siguiente leyenda: “ESTA TORRE FUNDADA EN LA MUY NOBLE Y ANTIGUA CASA DE OJEDA Y ALONSO REPARO Y EDIFICO EL MUY NOBLE Y HONRADO CABALLERO JUAN BAUTISTA DE OJEDA Y ALONSO DESCENDIENTE Y SEÑOR DE ESTA CASA INFANZONA Y SOLAR ALCAIDE DE LA VILLA DE TEBA”.
La prueba que demuestra que en Cuenca hubo miembros de esta familia sin aparente relación con la casa burgalesa, la vemos en la existencia de una carta de poder de un Alonso de Ojeda que “nació en Cuenca hacia 1470, hijo de Andrés de Ojeda, Caballero de Sierra, avecindado en Cuenca en los padrones de la parroquia de Santa María en los años 1473, 1475 y 1478” (Miguel, 1959, 87).
Pensamos como hipótesis personal que no es descartable que el nombre del Ojeda conquistador de Venezuela fue aprovechado por otras familias que portaban idéntico apellido, a pesar de que no tuviesen realmente nada que ver. Estas usurpaciones familiares eran una operación más habitual de lo que nos podemos imaginar, y de las que tenemos múltiples ejemplos dentro del ámbito nobiliario, ya que con ello se conseguía acrecentar el nombre y reputación de linajes que deseaban medrar socialmente.
Si analizamos los diferentes expedientes de los miembros de esta casa, apreciaremos que se invoca como origen del apellido la zona del solar burgalés. Destacando especialmente una reseña que para nosotros es crucial, siempre y cuando se base en un dato fidedigno. Se trata del expediente promovido por don Bernardo de Ojeda Verdugo y Abarca, familiar y alguacil mayor de la Inquisición de Sevilla en 1637. Tengamos en cuenta que este personaje dice ser hijo del Oidor del Consejo de Hacienda, don Hernando de Ojeda, así como nieto del alcaide Juan Bautista de Ojeda, y bisnieto de Fernando Alonso de Ojeda, y tataranieto de otro Fernando Alonso de Ojeda, quien se dice fue hermano del primer Inquisidor de Sevilla y los Reinos, Fray Alonso de Ojeda.
Recordemos que la tradición señala que el hermano de Fernando Alonso era primo hermano del conquistador Alonso de Ojeda, lo que de nuevo y de ser cierto indicaría que los padres de ambos descendían de un mismo abuelo, lo que cronológicamente ya nos debería de llevar hasta una familia de principios de siglo XV aproximadamente.
Nosotros por un lado hemos intentado buscar alguna relación entre la franja burgalesa y la familia asentada en Motilla del Palancar, de la cual presumiblemente procederían los Ojeda que encontramos en esta parte de la Manchuela. Precisamente, allí, en las montañas de Ojeda, el apellido Alonso, Alonso de Ojeda y Tamayo, aparecen entre varios de los vecinos afincados desde finales del siglo XVI, lo que de ser cierto, llevaría al menos la línea de Motilla hasta tierras burgalesas. Por ello, y siempre sin descartar que hubiese interés en los clásicos tejemanejes que adulteraban la historia de las familias, Alonso de Ojeda podría entenderse como un apellido compuesto de acuerdo a las referencias que podemos leer en este interesante enlace sobre la localidad de Tamayo: http://www.tamayo.info/index.php?pag=pueblo&cap=1&id=Demografia, donde queda patente que los apellidos de los bisabuelos de don Bernardo de Ojeda proceden de tierra burgalesa.
Tamayo es un despoblado de Burgos que dista a 11 kilómetros de Ojeda, municipio actualmente con 7 habitantes censados, y donde la familia alzaría su casa-torre solariega, sobre la que invocan las raíces del linaje.
Otras referencias nos indican que el abuelo de don Bernardo, don Juan Bautista de Ojeda, sirvió al Señor de Valverde (los Ruiz de Alarcón), pudiendo haber llegado la familia hasta Cuenca en tiempos de su padre, quien por su esposa (como decimos, de ser cierta la historia), con esos apellidos son claramente procedentes de la franja burgalesa. De ser así, seguimos sin entender que supuesto grado de parentesco existía entre el caballaero conquense que marcha a Venezuela, y el hijo de su primo que será quien se asentará en la provincia, a menos que éste ya lo hiciese por haber venido antes Alonso el conquistador o su padre, lo que podría haber favorecido su instalación.
Como decimos son muchas las dudas y sospechas sobre las vinculaciones y raíces del linaje. Nosotros, como mínimo podemos garantizar casi con total seguridad que el apellido Alonso de Ojeda, tiene sus orígenes en una preciosa zona del territorio burgalés, donde puede que también radiquen varias de las claves que desde la historiografía conquense algunos nos seguimos planteando, sobre la veracidad o conexión de unas familias y otras.
Otra cuestión es si los Ojeda de Burgos se aprovecharon del relato del conquistador conquense para engrandecer su pasado, o si realmente hay un vínculo genealógico explicado por la instalación de una línea parental previamente en la zona, sin olvidar otras tantas dudas que dificilmente pueden responderse en estos momentos con garantías.
David Gómez de Mora
Bibliografía:
*Archivo Histórico Nacional. Expediente de Caballero de Alcantara, nº 1087. Ojeda Verdugo y Abarca de Vallejo Verdugo Triviño, Bernardo de
*Miguel Ojeda, Gonzalo (1959). “El hidalgo Alonso de Ojeda”. Boletín americanista. Nº. 2, 1959, págs. 83-91
*Tamayo Aguirre, Eduardo. “Tamayo y su origen. Capítulo 5”. http://www.tamayo.info/index.php?pag=pueblo&cap=1&id=Demografia