En el año 1566 Ana Rodrigo, vecina de Valera de Abajo, tras no haber dejado descendencia con su marido ya fallecido Alonso Cavero, optó por fundar una capellanía, representada por más de medio centenar de fincas, y que en 1826 recaerán en el último párroco que las aprovechó.
Para ello se realiza un inventario, en el que se reflejan todas y cada una de las propiedades que había adscritas en esa fundación, y que según la documentación se ubicaban en el término de Piqueras del Castillo, por lo que debido al interés que desde el punto de vista histórico nos ofrece la toponimia, pasamos a continuación a transcribirlas.
Cabe señalar que muchos de estos nombres como veremos siguen usándose en la actualidad:
La presa (lindante con el río), las balsas (también limitando con el río), la labrada, puente somero, el llano, remata, el pinillo, nava el cubillo, cubillo somero, llano del cubillo, cañada gorda, fuente del dado, hoyo del pozo, el collado, el prado de la cruz, la cañadilla de cañada lengua, los santillos, hueco del sacejo, el Quintanar, hoya soriano, agua somera, hoya del fresno, la limosna, hacienda la limosna, el pilancón, el hondo de la cañada, la fuente de olacha, fuente del enebro, vallejo hondo, los vallejuelos, canalejo, el cubillejo (lindante al norte con la iglesia), pino hermoso, el puentezuelo, el morroncillo, la lagunilla, pajaranco, barranco la cal, puente del vadillo, vallejo del roble, montes llecos, la nava, mata-hombre, el rincón de la fuente del piojo y la padreda de las hontecillas.
David Gómez de Mora
Cronista Oficial de Piqueras del Castillo
Referencia:
* Archivo Histórico Provincial de Cuenca. Capellanía de Ana Rodrigo. Signatura: C.O.19/42