Como bien recordaba hace ya más de 40 años el historiador vinarocense José Antonio Gómez Sanjuán, la localidad ilerdense de Alós de Isil, es un precioso enclave, que podría guardar un nexo con una parte de nuestra historia durante el momento de su fundación.
Conocida es por muchos investigadores, la cuestión vinculada con la existencia de un caballero que aparece mencionado en las (no exentas de polémica) Trovas de Mn. Jaume Febrer. Y es que ya se ha comentado en alguna ocasión, que la presencia de este linaje de la nobleza catalana, aparece ya documentado incluso con anterioridad a la creación del Reino de Valencia. Este dato es importante tenerlo en cuenta, al margen de la clásica discusión sobre el contenido de esa obra muy relacionada con el historiador, bibliófilo y genealogista Onofre Esquerdo (y que vivió durante el siglo XVII).
Aunque José Antonio Gómez Sanján no indaga muy a fondo la cuestión en un artículo que publicó en el semanario Vinaròs en el año 1983, titulado “Los Alós (III). La cuna de los Alós”, su nombre es indicativo, de que el origen de este linaje, está vinculado con esta tranquila localidad, ubicada a 1270 metros de altura. Para profundizar más la cuestión, varias décadas después, Alfredo Gómez, gran historiador vinarocense e hijo del referido José Antonio, publicó una obra donde aportará más detalles sobre la relación existente entre los Alós y las tierras de Vinarós.
Sobre este lugar, lo poco que podemos decir, y que Gómez Sanjuán ya comentaba, es que esta localidad del Pallars Sobirà, posee una bonita iglesia románica, citada por primera vez en un acta de la Seu de Urgell en los años noventa del siglo XI. No obstante, como veremos, el templo iría sufriendo diferentes fases de reformas, ya que la portada que nos ha llegado, creemos que podría fecharse entre finales del siglo XII o principios del siglo XIII.
Como bien indica el título que dedicó Gómez Sanjuán a ese artículo, los orígenes de este linaje, deberían de buscarse por estas tierras. De la misma forma, conocemos muchas casas de caballeros catalanes, que desde esta franja septentrional fueron descendiendo en su interés por medrar y colaborar con la nueva empresa reconquistadora que emprendió Jaume I. Pensamos que alguno de los representantes de los Alós, arraigarían su pasado por estas tierras montañosas, ya controladas por los cristianos desde tiempos atrás.
Respecto a lo que es la iglesia de Alós, esta se encuentra dedicada a Sant Lliser. Su portada, ofrece una bonita decoración, recordándonos mucho a la de la vecina iglesia de Sant Joan de Isil.
Entre los motivos del arco de la portada de la de Alós de Isil, apreciamos el uso de ajedrezados que se combinan con flores hexapétalas, representándose en los capiteles figuras, tanto de personas como criaturas, que nos sumergen en la moralidad y mentalidad del medievo.
David Gómez de Mora
Referencia:
*Gómez Sanjuán, José Antonio (1983). ''Los Alós'' (III). La cuna de los Alós. Setmanari Vinaròs, pg. 13 - Dissabte, 29 d'Octubre del 1983