A partir de la segunda mitad del
siglo XVIII dos familias en Saceda comienzan a cobrar cierto protagonismo, se
trata de los Mochales y los Sevilla. Ambas establecieron alianzas mutuamente, surgiendo
de ellas personajes notorios dentro de lo que será la modesta historia local
del municipio.
Sabemos que la llegada de los
Mochales se produce de la mano de don Diego de Mochales, vecino natural de
Moncalvillo de Huete, perteneciente a una familia bien asentada, y que
englobaríamos dentro de lo que se conocería como la pequeña nobleza local. El linaje de los Mochales guardaba relaciones
muy estrechas con el círculo eclesiástico, pues muchos de sus representantes ejercieron
como sacerdotes, incluso fuera del territorio alcarreño.
Diego casó en Saceda en el año
1662 con María Saiz Vicente, apellidos sobre los que hemos tratado diversas
cuestiones. Fruto de su matrimonio nacieron algunos hijos, entre los que
estaban don Juan Manuel de Mochales, presbítero y beneficiado de la parroquia
del Salvador de Cuenca. Con ello vemos como la familia disponía de ciertos
recursos e influencias que traspasaban las fronteras de la iglesia del pueblo.
Don Juan Manuel llegó a poder aglutinar
sus bienes en torno a lo que jurídicamente se denominaba como un mayorazgo, figura
legal que normalmente era usada por los linajes de la nobleza para mantener
unido su patrimonio, de manera que este no se dividiera y quedara disperso,
para que así llegase al siguiente propietario igual de íntegro o incluso con
mayor cantidad de bienes, pues su propósito era el de ir ampliándolo, estando
como decimos prohibida cualquier acción que comportase su fragmentación, sólo
de este modo su futuro heredero, al margen de la responsabilidad que conllevaba
su mantenimiento, podría disfrutar de una mínima calidad de vida, y que en
parte era la que simbolizaba o representaba el nombre de su linaje de puertas
hacia fuera.
El hermano del presbítero fue
José de Mochales, marido de Rosa García, con quien celebró sus esponsales en el
año 1700. José murió en 1710, pagando por la salvación de su alma y familiares
más de 100 misas. Entre su descendencia dejó dos hijos que por ahora sepamos.
Uno fue Juan de Mochales, y el otro Juan de Mochales García, que casó a con una
miembro de la familia Sevilla. Una política matrimonial que establecieron de
manera permanente ambos linajes, pues como veremos su hermana Isabel corrió el
mismo destino.
La posición acomodada de los
Mochales en Saceda es notoria, a pesar de ser una familia recién llegada a su
nuevo destino, pues recordemos que las raíces del padre de José y el presbítero
los ubicaban en el cercano Moncalvillo de Huete. La madre de ambos, Rosa
García, era la cuñada de la hija del escribano de Saceda, y cuyo oficio recaía
por la línea de los Saiz.
Relación genealógica de la familia Sevilla con Mateo Saiz, fundador de
un patronazgo destacado de Saceda del Río. Archivo Eclesiástico de Huete
Como vemos las alianzas entre
gente de un mismo estatus era una constante, marcando las riendas de las
pequeñas sociedades rurales, incluso por muy poco influyentes que pudiesen resultar
fuera del contexto municipal.
Tampoco podemos pasar por alto a la
mencionada Isabel de Mochales, hermana de José y el párroco, que en 1693 casó
con el sacedeño Tomás de Sevilla. Él era hijo de Pedro de Sevilla y Magdalena
Rodríguez, y junto con su esposa tuvieron varios hijos y de los que nosotros
por ahora hemos podido documentar cuatro. Uno era Tomás de Sevilla el mozo,
junto con su hermano Manuel de Sevilla, quien se cree que pudo ser el mismo que
aparece documentado como alcalde de la localidad durante la realización del
Catastro de Ensenada, y que compartía dicho cargo con Manuel de la Fuente.
Tomás e Isabel gozaban de una
buena posición, por ello y como solía ser habitual, tras su defunción pagaron
tantas misas como pudieron para la salvación de sus almas. Sabemos que Tomás mandó
un total de 360. De la misma forma que su esposa solicitó enterrarse en la zona
más privilegiada del templo, y que era la capilla mayor de la Iglesia de la
Natividad, pues eran de los afortunados que contaba con una sepultura en ese
lugar tan cotizado dentro del edificio religioso.
María de Sevilla y de Mochales,
que era hermana de los anteriores, casó con Sebastián Cantero, vecino allegado
desde Carrascosilla, pero que se asentó en la localidad de manera permanente.
Intuimos por los pagos de misas realizados tras su defunción, que ambos
contaban con ciertos medios, pues cuando falleció Sebastián en 1770, éste pagó
un total de 300 misas, además de mandar enterrarse en la sepultura que tenían
en la capilla mayor, y que según intuimos, podría ser la misma que pertenecía a
la familia de su esposa, donde ya desde ocho años antes también descansaba su
cuerpo tras haber fallecido en 1762, con una manda de misas igual a la de su
esposo.
El hijo de Sebastián y María se
llamó Sebastián Cantero de Sevilla, quien tenemos documentado como diputado
local y hombre de confianza de los propietarios más ricos del pueblo por aquel
entonces, los Martínez. No es por ello casual que apareciese como testigo en el
proceso de ennoblecimiento de dicha familia. Tampoco se nos puede olvidar el párroco don
Isidoro de Sevilla, presente por aquellas fechas como cura del municipio, y que
obviamente habría que relacionar como un representante más de este linaje.
Genealogía de los Mochales de Saceda del Río (elaboración propia)
Por último, otro hermano de María
de Sevilla fue Juan de Sevilla, casado en 1720 con Rufina del Olmo, esposa que
le valió a su descendencia como eslabón con el que poder revindicar el
patronato que fundó Mateo Sánchez. Rufina tenía por hermano de su tatarabuelo a
dicho fundador, y aquello por muy lejano que pudiese parecer, era un elemento a
favor del linaje de los Sevilla que estos aprovecharán. Es por ello que
Francisco de Sevilla, casado por cierto con Josefa Cantero (lo que de nuevo
vuelve a cruzar los intereses matrimoniales entre estas familias), consiguió
que se le adjudicara la prebenda de dicha fundación.
Igualmente Manuel de Sevilla,
hermano de Francisco llegó a ser pretendiente a opositor, lo que cercaba mucho
más el interés que tuvo la familia por aprovechar los beneficios de aquella
fundación que había creado su pariente lejano.
Iglesia del Salvador de Cuenca de la que era Beneficiado el presbítero
sacedero don Juan Manuel de Mochales. Imagen de
amarguraconsanjuanapostol.blogspot.com
David Gómez de Mora
Referencias:
* Archivo Eclesiástico de Huete. Libro III de matrimonios de
Saceda del Río.
* Archivo Eclesiástico de Huete. Libro de defunciones de
Saceda del Río (1670-1738).