Hablar
del origen de algunas familias piquereñas, es remontarnos hasta un
momento preciso del siglo XVI, periodo en el que muchas de éstas
aparecen registradas en los libros parroquiales del municipio, y que
como los investigadores versados en la materia ya saben, se hallan
custodiados en el fondo del Archivo Diocesano de la ciudad de Cuenca.
El caso que nos ocupa esta pequeña reseña viene a colación del
origen de dos linajes que por aquellos tiempos ya estaban asentados
en este lugar. Por un lado tendríamos a los Lucas, un apellido
extendido entre algunas de las líneas de Barchín del Hoyo, y que
probablemente pudo haber llegado desde aquí hasta Piqueras. Luego
estaría la línea de los Moya, la cual desaparecerá rápidamente
del municipio, aunque no por ello dejará de ser menos importante,
pues la veremos estableciendo entronques con casas de labradores y
ganaderos del pueblo.
Analizando
el primer volumen de bautismos de la parroquia piquereña, veremos
como ya
aparecen
vecinos que son sus portadores, es el caso de una hija de Fernando de
Moya y Ana de Lucas, y que recibió el sacramento iniciático en
1566. Será precisamente ese mismo año cuando Francisca de Moya y
Buedo también lo obtendrá. Ésta era hija de Sebastián de Fuentes
e Isabel de Moya. Una hermana más pequeña de Francisca se llamará
Ana de Moya.
Por
la misma fecha Pedro de Lucas bautizaría en 1568 a su hija Juana. En
1579 de nuevo se nos recuerda que otro residente llamado Pedro Lucas
(marido de Catalina Ruiz), bautiza a su hija Quiteria. En la década
de los setenta veremos este
nombre de nuevo
(ignoramos si es el mismo Pedro
de antes),
como marido de Francisca Torrente, de quienes nacerán varios hijos,
todo ello sin olvidar a Juan de Lucas, marido de Ana López, quienes
aparecen registrados como vecinos de Barchín del Hoyo, aunque
responsables
de haber
dejado
una
variada descendencia que finalmente se acabará asentando en
Piqueras.
Arada
y siembra (dibujos de De la Rosa). En
quintanilladetresbarrios.com
No
debemos olvidar que la familia Buedo estaba residiendo
en Barchín, razón por la que pensamos que probablemente la
ascendencia de Isabel estuviese estrechamente relacionada con la
línea de hidalgos de este linaje establecida en dicho
municipio.
En 1584 será
bautizada Inés de Moya y Lucas, hija de Fernando de Moya y Ana de
Lucas. Un año después lo hará un retoño de Miguel de la Orden y
Ana de Moya.
Sabemos
por una referencia de 1741 que el vinculo fundado por la citada
Isabel se componía de 45 almudes, los cuales poco después acabarían
recayendo en la casa de los Cambronero, una familia también asentada
en Barchín. La herencia pasaría a manos
de uno
de sus hijos, sobre quienes aparecen algunas referencias entre los
legajos sueltos que se conservan del municipio. Sus nombres serán
Matías de Fuentes y Pedro de Fuentes.
David
Gómez de Mora
Bibliografía:
-Archivo
Diocesano de Cuenca, libro I de bautismos de Piqueras del Castillo.
Sig. P-2583